Isla Prangli, otro ritmo de vida en Estonia
Prangli es una pequeña isla cerca de Tallin, con un ambiente tranquilo y posibilidades de pesca. Hay un montón de razones para descubrir la isla. Prangli está lo suficientemente cerca para tener una excursión de un día desde la capital y lo suficientemente lejos para experimentar algo completamente diferente de Tallin.
No se sabe exactamente quiénes habitaron la isla Prangli y quiénes tuvieron el honor de ser los primeros habitantes de la isla. Se tiene registro que para el final del siglo XIII o principios del siglo XIV la isla estaba poblada con suecos, más tarde también con estonios y finlandeses. La isla se contagió de la cultura de Estonia en el siglo XVII.
Prangli es la única isla en la costa norte, donde la vida del pueblo no desapareció durante la época soviética. Hoy en día hay alrededor de 150 personas que viven en la isla.
La mitad de la isla está cubierta de bosques con pino, que proporciona buen refugio de los vientos. Por esa razón la madera local no se utiliza para calefacción, sino que la leña es traída desde otros lugares. La isla es lo suficientemente pequeña como para tener un paseo agradable, pero es posible alquilar bicicletas y recibir alojamiento, sauna y pescado ahumado. De hecho, la principal fuente de ingresos de los habitantes de Prangli, además del turismo, es la pesca.
Los sitios de patrimonio cultural son la capilla de San Lorenzo, y el cementerio de la aldea en la costa sur y el cementerio en la costa oriental, que está dedicado a los desaparecidos del barco de vapor «Eesti Rand», que cayó hacia el sur desde el cabo Vanakabeli. La capilla de madera de San Lorenzo, que fue consagrada en 1848, fue traída pieza por pieza desde Sipoo, Finlandia, y fue elaborada sobre el terreno.
Hay conexiones de barco regulares entre el puerto de Kelnase en Prangli y el puerto de Leppneeme en la parte continental. Hay diferentes maneras de llegar a la isla: desde Tallin hasta Estonia se puede llegar en transporte regular de ferry, barco de motor o embarcaciones semirrígidas de safari. El viaje sobre el mar tiene una duración de aproximadamente una hora.
Foto Vía: Ivo Kruusamägi
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