Viaje a Cracovia, guía de turismo
Cracovia es una de las ciudades más bonitas de Europa. Curiosamente no es tan turística como los clásicos destinos europeos (París, Londres, Praga, Viena…) y sin embargo la belleza de esta antigua capital polaca cautiva a todo aquel turista que la visita. Sin ir más lejos, su centro histórico está considerado, desde 1978, Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.
Leyendas, historia y modernidad se mezclan en Cracovia. Tanto es así que se cree que aquí se halla una de las siete piedras sagradas, una misteriosa fuente de energía, situadas en distintas partes del mundo. Pero además de este aura mágico, Cracovia se vuelve bulliciosa, especialmente con la llegada del buen tiempo.
El río Vístula la duerme desde el origen de los tiempos, en un abanico de arte y cultura. Festivales, mercadillos, teatros callejeros, Cracovia no solo es una ciudad con grandes monumentos y, sino que también ostenta el privilegio de ser uno de los rincones culturales más interesantes de la Europa del Este.
Turismo en Cracovia: qué visitar
– Centro histórico de Cracovia
Patrimonio de la Humanidad desde 1978, es uno de los mejores ejemplos de arquitectura medieval de Europa. Está lleno de edificios histórico, palacios, iglesias y restos de antiguas fortificaciones. Este centro histórico gira alrededor de la Plaza del Mercado, y aquí se le conoce como Stare Miasto. Su laberinto de callejuelas data de mediados del siglo XIII, y está perfectamente delineado de forma perpendicular. Una delicia pasear por aquí a cualquier hora del día.
– Barrio Judío
Conocido en Cracovia como Kazimierz, se trata de uno de los rincones más visitados de la ciudad. Alberga diferentes sinagogas, iglesias y otros edificios de interés. Fue fundado en el siglo XIV por el rey Casimiro el Grande, aunque los judíos no llegaron hasta aquí sino un siglo más tarde. El corazón del barrio es la calle Szeroka, donde se halla la Sinagoga Vieja, una de las más hermosas de Europa, y el cementerio judío. Es también un barrio de gran animación nocturna, con cafés, bares, pubs y restaurantes.
Más información: barrio judío de Cracovia.
– Plaza del Mercado
Corazón del centro histórico, con sus 200 metros de largo es una de las plazas más grandes de Europa. Fue fundada a mediados del siglo XIII y alrededor de ella se encuentran algunos de los monumentos más interesantes de Cracovia. Veréis la Basílica de la Asunción de la Virgen María, con sus dos torres y un altar bellísimo, el edificio de la Lonja de los Paños, construido en el siglo XIV, y hoy convertido en museo, y la Iglesia de San Adalberto.
– Catedral de Wawel
Situada sobre la Colina Real o Colina de Wawel, su aspecto actual data de principios del siglo XIV, época en la que fue reconstruida la vieja iglesia por un incendio. Está considerada como el santuario nacional de Polonia, ya que en ella se coronaban a los reyes polacos. En ella hay que visitar la Capilla de San Segismundo, del siglo XVI, que alberga las tumbas de varios reyes polacos; y la tumba de Casimiro, de finales del siglo XV.
– Castillo de Wawel
Situado en la Colina de Wawel, fue la residencia oficial de los reyes y obispos polacos. Es uno de los monumentos nacionales más importantes de Polonia, ya que en él descansan numerosos reyes, reinas y grandes personajes de la historia polaca. En su interior ha habido coronaciones de reyes y algunos de los acontecimientos más importantes del país. Su origen hay que buscarlo en el siglo XV, y para disfrutar del interior hay que pagar entrada.
Más información: la colina y el castillo Wawel.
– Iglesia de San Andrés
Una de las iglesias más bonitas del centro histórico de Cracovia. Fue construida en el siglo XI en estilo románico, y si os fijáis bien parece una fortaleza. Precisamente a mediados del siglo XIII albergó a gran parte de los ciudadanos de Cracovia ante el ataque del ejército tártaro. Destacan exteriormente sus dos torres y, en el interior, restaurado en el siglo XVIII, encontramos numerosas obras de arte y un curioso púlpito en forma de barco.
Excursiones en Cracovia
A unos 70 kilómetros al oeste de Cracovia podemos visitar el antiguo campo de concentración de Auschwitz. No es una visita muy alegre (barracones, alambres de espino, hornos crematorios…) pero sí de gran impacto, ya que la mayoría de los edificios se conservan en perfecto estado. Más cerca, 15 kilómetros hacia el sur, se halla Wieliczka y sus famosas Minas de Sal, explotadas desde el siglo XIII. De las grandes ciudades a visitar desde Cracovia, la más cercana es Katowice, a 80 kilómetros.
Información práctica para viajar a Cracovia
Clima
El clima en esta zona varía mucho de una época a otra. En invierno hace bastante frío, con nevadas y temperaturas bajo cero tanto de día como de noche. En verano sube la temperatura hasta los 25 grados, posiblemente la mejor época para viajar a Cracovia (al igual que en primavera, que ronda los 15 grados). Aún así, en verano llevaros un paraguas, porque es la estación en la que se suceden principalmente las lluvias.
Compras
En Cracovia podéis comprar encajes, muñecas tradicionales, artículos de cuero, joyería… Las tiendas más turísticas se hallan en el centro histórico, especialmente en las calles Bracka, Florianska y Szewska. Un poco más al norte de la ciudad vieja también encontramos diferentes tiendas, además de mercadillos de alimentos. En el barrio judío tenemos asimismo otros mercadillos y tiendas de antigüedades. Los centros comerciales más grandes se hallan en la parte moderna de la ciudad.
Gastronomía
Por el centro histórico de la ciudad veréis muchos restaurantes en los que comer algunas de las especialidades de Cracovia. Entre ellas están las salchichas y las pierogis (empanadillas polacas), que pueden rellenarse de varios condimentos, además de la zurek o típica sopa polaca. No faltan las carnes, como el pato con manzana o la chuleta de cerdo rebozada, así como los postres, destacando el sernik o pastel de queso. Para beber hay cerveza, y para más tarde un vodka.
Vida nocturna
El centro histórico de Cracovia es uno de los mejores lugares para pasar la noche en la ciudad. Allí encontramos cafeterías, bares, terrazas y antiguas bodegas para tomar unos vinos o un vodka. También en el centro histórico hay algunas discotecas para bailar hasta la madrugada. El Kazimierz o Barrio Judío es ideal para la noche de los estudiantes y gente joven. Las bebidas están mucho más baratas, sobre todo la cerveza.
Transportes
El centro histórico de la ciudad es compacto, por lo que se puede recorrer fácilmente a pie, o incluso alquilando una bicicleta, muy usual en la zona. Si queremos desplazarnos más cómodamente, en Cracovia contamos con autobuses urbanos y tranvías. Por las noches también hay un servicio nocturno. Los billetes se compran en quioscos o tiendas, aunque también se puede hacer en el autobús, pero sale más caro. Para desplazamientos más largos contamos con taxis. No es muy recomendable optar por conducir, ya que el centro histórico es prácticamente peatonal y hay poco aparcamiento.
Cómo llegar
La mejor forma de llegar a Cracovia es a través del Aeropuerto Internacional Juan Pablo II, situado a once kilómetros de la ciudad. Desde aquí hay autobuses (números 192 y 208) que nos llevan a la estación de tren de Cracovia. El trayecto es de 25 minutos. También hay taxis a la salida de la terminal. Si llegáis desde otra ciudad polaca, lo mejor es venir en tren. Desde Varsovia se tarda dos horas y media. La estación se halla a 15 minutos a pie del centro histórico.
Alojamientos
Aquí encontráis hoteles de todo tipo, desde los más modernos y exclusivos, hasta hoteles de nivel medio, pensiones y hostales más modestos. Puedes informarte y reservar en el siguiente enlace.
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Si queréis más información (monumentos, excursiones, hoteles, información práctica, visitas, etc…) nada mejor que pinchar en el enlace: Cracovia

Categorias: Polonia
Gracias Bibiana. Necesitábamos políticas como las que hacéis desde tu meinstirio. Mucho ánimo y oídos sordos a los necios.
Yo he estado en Cracovia en Marzo. He pillado un finde con temperatura en la casa de los -15º. Sin embargo, brillaba el sol y me encantó la ciudad. Eso sí, no he podido ir a las minas de sal. Habéis estado? Vale la pena?
Un saludo