El Castillo de Praga, una visita sobrecogedora
A la margen izquierda del río Moldava, pasando por la ciudad pequeña de Malá Strana, se encuentra la que es considerada la mayor construcción medieval del mundo, el Castillo de Praga. Gracias a su ubicación sobre una colina rocosa le permite obtener una imagen imponente y sobrecogedora cuya historia se remonta a mediados del siglo IX, y ha sido testigo de más de 1100 años de evolución del estado Checo.
En realidad no solo se trata de un edificio, es un complejo monumental de palacios, edificios religiosos, de oficina, de fortificación y de viviendas de varios estilos arquitectónicos, los cuales están interconectados por una serie de patios y pequeñas calles, ocupando una extensión de 45 hectáreas. En principio, esta fue la residencia príncipes y reyes, y desde el año 1918 es la sede presidencial.
Se destacan en este gran complejo la Catedral de San Vito, su principal atracción, catalogada entre las más bellas catedrales de Europa, y es uno de los mejores ejemplos de arquitectura gótica en el mundo. La sede del Arzobispado de Praga se encuentra aquí y hasta 1836 fue el lugar de coronación de los reyes y reinas de Bohemia. Dentro de la catedral se encuentra la Capilla de San Wenceslao, con una estupenda decoración, y donde se guardan las reliquias del santo.
Otras reconocidas y valiosas construcciones son la Basílica y Convento de San Jorge, que contienen arte antiguo de Bohemia, la Torre de Pólvora o Mihulka, el Palacio Real, las Galerías de pintura renacentista y barroca en las antiguas caballerizas del castillo (con obras de artistas de fama mundial como Tiziano, Rubens y Tintoretto), el callejón del Oro y la Alquimia con una encantadora colección de pequeñas casas antiguas pintadas con colores vivos y tejados altos e inclinados (Según la leyenda, aquí los grandes alquimistas se daban cita para descubrir la fórmula hacer oro), la capilla de la Santa Cruz, la Torre Dalibor, el Palacio Lobkovitz (residencia de la poderosa familia católica Lobkovitz, hoy museo histórico), la Torre Negra entre otras muchas atracciones.
La evolución arquitectónica de varios siglos se refleja en lo diferentes estilos arquitectónicos presentes allí, como el gótico, el neogótico, renacentista y barroco, sin duda un recorrido mágico e imperdible por más de 1000 años de historia.
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